Creo que es la postura más coherente en este foro.
A pesar de nuestras diferencias debe prevalecer la unidad de al menos saber que estamos defendiendo la fe.
Que estamos haciendo apología de la fe, de Dios y de Cristo.
Que no nos mueve fomentar ninguna religión.
Que demasiada oscuridad y error andan sueltos.

Y por encima de todo inspirar y hacer prevalecer el amor a Dios y al prójimo como a nosotros mismos.

Sí, en esta linea tenemos que estar unidos.

Y yo os pido perdón si de alguna manera, que seguro que sí, me he extraviado de ese fundamento.

Por encima de las diferencias de doctrina y formas está la fe en Cristo.
Nosotros debemos ser testigos de nuestra fe, a pesar de nuestras tantísimas imperfecciones personales. 
Si buscamos a Dios y estamos cerca de El, ya se encargará de limar nuestras aristas, quemar nuestras vanidades (hojarasca y heno) y sometidos a todo tipo de prueba, que permanezca nuestra fe que es mucho más valiosa que el oro.