miércoles, 2 de marzo de 2011

Ciertamente muchas conclusiones se sacan de las cosas que vemos, y nos hacemos una deducción lo más razonable y lógica posible.
¿Quizás falta de comunicación?
Si el cura lo hubiera explicado.
Si los filigreses lo hubieran preguntado......
¿Hubiera habido un entendimiento del por qué de las cosas?

Estoy totalmente de acuerdo contigo que hay personas que pueden tener muchos conocimientos pero que no son capaces ni de ayudarse a sí mismo ni de hacerlo a los demás.
El conocimiento debería ir acompañado de la acción.
Al igual que las obras son la evidencia de la fe que decimos tener.

Quizás porque estoy con la idea del sufrimiento y del temple.
¿No hay verdades que solo se graban en el corazón a través del fuego de la vida, de la experimencia, del dolor, de la soledad, del sufrimiento intenso....y de tantas otras circunstancias?

Podemos saber mucho del amor hasta que amamos de forma incondicional.
Podemos saber mucho del perdón hasta que perdonamos una muy grave ofensa.

La misma vida creo que nos pone a prueba para que nosotros mismos no demos cuenta si lo que sabemos, lo que creemos y lo que decimos....realmente no vivimos.

Y sobre todas las cosas, puesto que Dios es una parte muy fundamental en mi ser.
Para mí lo más importante es sentir a Dios, palparlo en mi espíritu, vivirlo en mi alma.

A pesar de las tremendas contradicciones y luchas que tenemos que soportar los creyentes por causa de mantener nuestra fe personal.....lo que realmente consuela y compensa, es cuando se manifiesta su presencia espiritual en nosotros.
No estamos muy alejados.

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