miércoles, 2 de marzo de 2011

¿Quien es el responsable de que ocurran estas injusticias y miserias en el mundo, Dios o el hombre?
Ahora bien la respuesta que dió ese párroco para mí no es válida ni coherente.
Si Dios probara a alguien, no sería a los débiles, sino al resto de la sociedad y a sus gobernantes en todo caso.
Ante una situación de miseria sería el resto de la sociedad quién tendría que probar su buena voluntad.

La codicia del ser humano lleva a que pocos tengan mucho y muchos tengan poco.
La corrupción lleva a que los gobernantes de estos paises pobres no administren los recursos que reciben para sofocar el hambre y la enfermedad...por el contrario emplean dinero de ayudas para engordan cifras en sus cuentas de Suiza y para mantener guerras fraticidas.

La prueba consiste en que el que tiene y al que le sobre dé al que no tiene. Pues esto es también un precepto fundamental en el mensaje de Dios.
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Y ahora voy a la cuestión de la fe.
¿perderemos la fe en Dios al contemplar el egoismo y la codicia humana?

¿Cómo se ha usado la libertad....la voluntad de socorrer al desvalido?

A mí personalmente no afecta mi conocimiento y relación con Dios, pues ya no solo porque sé que Dios no se hace responsable del mal uso de nuestra libertad, sino porque sé que Dios ni aprueba ni se complace con la miseria de este mundo.

Hay tres grupos que son muy queridos para Dios: Los huérfanos, las viudas y los extranjeros.  En el contexto de aquella época eran los seres más desvalidos social y económicamente.  Dios promete bendición a quienes por sus obras, por su compromiso, por su generosidad se convierten en la mano misericordiosa de Dios.

Y volvamos al punto de partida, al propósito de la cuestión que planteamos en este foro: Dios.

¿Dejará de existir Dios por la maldad manifiesta del ser humano?.
O bien, si queremos atribuir a Dios la responsabilidad de estas miserias ¿por qué?

Si Dios hubiera sido indiferente, si a El nada le importara el pobre y desvalido, habría permanecido callado...no se habría manifestado ni a favor ni en contra.....pero Dios ha hablado, y ha declarado abierta y claramente que la responsabilidad de nuestros actos es solo nuestra. La libertad implica responsabilidad.  Si hubieramos sido robots, autómatas...Dios no nos habría reclamado ninguna responsabilidad.   Y ser responsable consiste también en asumir nuestros propios actos.

El sufrimiento en sí puede ser aprovechado para limpiar y limar muchas actitudes y conductas, reconduciéndonos al hecho de que somos un poco ante un todo, despertando en nosotros los valores que realmente son fundamentales.     Pues el sufrimiento puede venir de manera imprevista ante la muerte de un ser querido, ante la pérdida de nuestros bienes, o ante el asalto imprevisto de una enfermedad.
Pero cuando el sufrimiento está en el otro, y ese sufrimiento se puede paliar con recursos como comida y medicinas, cuando están nuestros almacenes llenos.... y contemplamos ya con la conciencia cauterizada (imágenes por televisión) la indigna situación de nuestro semejante.........¿a quién culpamos?  ¿no martillea constantemente su palabra: "Socorred al hambriento".?

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